La OMS estima que cada año se podrían evitar 2,5 millones de muertes en el mundo si el consumo de sal llegara al nivel recomendado de no más de 5 gramos por día, lo que equivale a una cucharadita de té, que en sodio son 2000 mg.
El alto consumo de sal se asocia a un mayor riesgo de desarrollar hipertensión arterial, problemas en el corazón como insuficiencia cardíaca e infartos, ataques cerebrovasculares, daño en los riñones que llevan a la insuficiencia renal e incluso la posibilidad de presentar cáncer gástrico y osteoporosis.
Cuánta sal consumimos los argentinos
En Argentina, se estima que el consumo de sal duplica la cantidad recomendada por la Organización Mundial de la Salud. Además, se calcula que la mayor cantidad de sal que consumimos proviene de los alimentos procesados y no de la que añadimos al cocinar o comer.
Según cifras oficiales del Ministerio de Salud de la Nación en nuestro país el 30% de los adultos de entre 15 y 64 años y el 7.8% de los niños de 10 a 13 años padecen hipertensión arterial.
Alimentos con mayor contenido de sal
Los grupos de alimentos que aportan mayor cantidad de sal son: panificados, galletitas, productos de copetín; productos cárnicos; quesos, sopas, caldos, aderezos y conservas. Algunos alimentos contienen elevada cantidad de sal y no son salados, ya que suelen presentar otros ingredientes que enmascaran su sabor.
Cómo reducir la sal en casa
El consumo de menos de 5 g/sal (<2 g de sodio) por adulto/por día es el límite recomendado por la OMS y el objetivo que los países deben alcanzar con sus iniciativas de reducción de sal/sodio en la dieta. Para lograrlo la OMS recomienda:
- Moderá el consumo de alimentos procesados.
- Cociná sin sal y, de ser necesario, agregá un poco luego de la cocción.
- Evitá el salero en la mesa, también contribuye a desarrollar un hábito saludable en los niños.
- Realzá el sabor de las comidas con hierbas aromáticas frescas, especias, jugo de limón, ajo, etc.
- Aumentá el consumo de frutas y verduras.
- Recordá colar y enjuagar los alimentos enlatados.
- Limitá el consumo de comida rápida.
- Si elegís comprar alimentos procesados, leé las etiquetas y optá por los que tengan menos sodio. Para calcular la relación sal/sodio, tené en cuenta que la cantidad de sal es igual a la cantidad de sodio multiplicada por 2.5 (sal = sodio x 2.5).